La siguiente serie está dividida en tres partes diferentes. Primero unos ejercicios para pedir silencio al grupo sin tener que recurrir a levantar la voz. A menudo ocurre que el grupo está disperso en el lugar, o que hay un fuerte murmullo y necesitamos que el grupo permanezca en silencio para dar alguna indicación y aunque no nos guste, terminamos dando un grito para pedir silencio. Para evitar esta situación y que se cumpla el objetivo, presentamos una serie de herramientas con este mismo fin. En la segunda parte presentamos unas dinámicas para que el grupo aprenda a respetar los turnos de habla y escucha sin la necesidad de que el/la dinamizadora tenga que dar o quitar la voz a cada persona y poco a poco aprendan a auto-regularse y finalmente respetar los turnos sin la necesidad de ninguna técnica ni moderador/a. Para terminar, unos juegos que pretenden favorecer la escucha activa en la comunicación verbal y por otra parte, favorecer nuevas posibilidades de comunicación, como la no verbal.